En Recoletos Consultores llevamos ya muchos años desarrollando con éxito proyectos de corredurías de seguros de alto rendimiento para grupos empresariales, colectivos y emprendedores.
La situación ciertamente en los últimos años se ha complicado sobremanera.
Todos los modelos económicos, sociales, y culturales en definitiva que se están implantando en sociedades como la española, se soportan en una tensión constante entre la tradición, la búsqueda de contratos laborales indefinidos y estables, las lógicas reivindicaciones de sindicatos y defensa de derechos que parecen básicos; y la realidad tozuda, que nos obliga a recurrir a modelos de contratación basados en el rendimiento y en los resultados, que parecen ser los únicos que aportan viabilidad real a las empresas.
En este contexto, qué podemos decir, de cambio de «paradigma», sin renunciar al estado del bienestar, pero entendiéndolo a la americana, o sea, relativizando muchas cosas que para nosotros eran inamovibles; el empresario se siente desamparado, también el trabajador, y en mayor medida que ningún otro, el autónomo.
Esta situación actual, que llamamos por resumir «crisis«, y que supone en realidad cambios de mentalidad y ajustes tremendos, está teniendo unas consecuencias muy importantes y que van a perdurar durante muchos años; las cosas no van a volver a ser como antes, seguro que van a mejorar, pero en una dirección probablemente distinta a lo que teníamos antes.
Los trabajos con contratos laborales indefinidos y estables, van a seguir existiendo, pero el trabajador va a seguir en la empresa sólo el tiempo que sea realmente necesario y rentable para ella; olvidemos esas relaciones «de por vida», y esa estabilidad laboral en cualquier circunstancia; simplemente la empresa, no está situación de aguantar como antes hacía, de dar más y más oportunidades, de hacer de todo antes de prescindir de alguien. Ha cambiado el escenario y las reglas del juego. El trabajo estable de hoy es probable que sea pan para hoy y hambre para mañana.
Los sectores de la economía, también en buena medida «cambian». Salvo los primarios, que siempre estarán protegidos, en buena lid, por circunstancias obvias; todos los vinculados con servicios, estarán a albur de circunstancias que rara vez el propio pequeño empresario o autónomo va a poder controlar, por lo que de igual forma habrá de analizar muy bien el sector al que dedica sus esfuerzos.
En este contexto, Recoletos Consultores lleva años trabajando, para ayudar a empresas, organizaciones y personas, a desarrollar sus negocios y sus carreras profesionales, en su caso.
Desde hace años, hemos argumentado que el sector asegurador reúne una serie de características que lo hacen atractivo para trabajarlo por parte de personas que realmente quieren depender de su propio trabajo, no de circunstancias externas. Además permite regular la intensidad de la actividad, en función de la situación personal de cada momento y garantiza el futuro profesional de cualquiera que consiga desarrollarse de manera acertada, porque es el único trabajo en el que DE VERDAD, el trabajo de hoy te aporta ingresos estables durante muchos años, a través de la gestión de la cartera.
Lo cierto es que no hay más que analizar el peso del sector seguros en la economía moderna, y nos podemos hacer una idea de las oportunidades profesionales que ofrece. Todo actualmente se asegura. Todo absolutamente.
No menos cierto es, que de estos atractivos, se aprovechan las compañías aseguradoras, convenciendo a magníficos profesionales para trabajar para ellas, como si de empleados se tratase, pagándoles atractivas comisiones, y asegurándose de que aporten clientes que incrementarán la cartera PROPIEDAD de la PROPIA COMPAÑIA. Planes de carrera atractivos a corto plazo, ofertas tentadoras de oficinas en el futuro, todas las estrategias del marketing y la comunicación más eficaz para la gestión de grupos, …todo lo necesario para mantener a extraordinarios comerciales técnicos y asesores, trabajando como si fueran EMPLEADOS, pero a comisión y sin derecho alguno sobre la titularidad de las carteras que desarrollan.
La figura de CORREDOR o CORREDURIA en su caso de seguros, puede entenderse como la más atractiva dentro de las opciones que existen en nuestro país. Permite asesorar a los clientes, desde una posición de objetividad, conocimiento de las diversas opciones, representando en todo caso a estos mismos clientes, y contando con las compañías de seguros, como proveedores que serán elegidos o no en función de la calidad de su producto y de su servicio, y frente a las que defenderá en todo caso los derechos de sus clientes.
Por otra parte, la labor ardua y complicada de ir consolidando una cartera de clientes, se ve recompensada, porque efectivamente esa cartera es de SU PROPIEDAD, con todo lo que esto conlleva.
Con este panorama, la elección parece sencilla. Pero la realidad nuevamente nos pone los pies en el suelo. Se tarda varios años en CONSOLIDAR UNA CARTERA de SEGUROS.
Los ingresos durante estos primeros años son más o menos reducidos, pero sobre todo, son VARIABLES, lo que dificulta muy notablemente el que PROFESIONALES que pudieran ser IDONEOS para la profesión, lleguen realmente a conseguirlo.
Para alguien con responsabilidades familiares, el temor al riesgo, la falta de ingresos estables, le abocan normalmente a trabajar para una compañía de seguros como agente afecto o similar, renunciando así a la TITULARIDAD de su cartera, con lo que está trabajando literalmente para la compañía; o a compaginar la actividad durante años con otra fuente de ingresos que le permita subsistir y redondear unos ingresos estables y suficientes; con lo que normalmente, el proceso de formación y profesionalización, evoluciona poco o nada, porque la disposición de tiempo es escasa.
Una opción profesional totalmente
novedosa
En este contexto, hace unos años en Recoletos Consultores, de forma conjunta con el equipo de SPASEI Correduría de Seguros vinculada para los desarrollos en empresas y organizaciones, nos propusimos diseñar una opción profesional que elimina las barreras de entrada a las personas válidas, y que se diferencie de la TOTALIDAD de opciones que existen en el mercado, bajo el epígrafe de «franquicias» o similar.
Una opción profesional única en el mercado nacional. Pensada para personas responsables y con ganas de trabajar, de no tener problemas ni dependencias en el presente ni en el futuro, a pesar de cuantas crisis puedan venir. Pensada para perfiles ambiciosos, que tengan claro que están invirtiendo en su propio negocio, en su profesión, con las ideas claras. Personas que quieran hacerse con el mercado asegurador, a corto, medio y largo plazo, en una zona o entorno determinado y que no les asuste trabajar para ello.
Si te planteas trabajar en el sector seguros no dudes en solicitar asesoramiento sin compromiso.
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